La Autoridad Portuaria Bahía de Algeciras (APBA) ha comenzado esta semana las obras de renovación de los pantalanes en la margen derecha de la dársena deportiva de El Saladillo, en el Puerto de Algeciras. El proyecto, que supera los 5,3 millones de euros, fue adjudicado a la empresa Dragados. Los trabajos implican la demolición de los actuales pantalanes fijos de hormigón armado, que muestran deterioro y corrosión, y su reemplazo por estructuras flotantes similares a las ya instaladas en la zona norte de la dársena, ofreciendo mayor comodidad para los usuarios.
Además, las nuevas instalaciones permitirán una redistribución de los atraques para embarcaciones deportivas, aumentando la oferta en aproximadamente cincuenta nuevos espacios. Durante la ejecución de las obras, y según lo acordado con los clubes náuticos, los usuarios afectados serán reubicados en un pantalán provisional, denominado número 9, el cual será el primero en construirse y continuará operativo tras la finalización de las obras.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Gerardo Landaluce, ha explicado que la primera fase de la obra se centrará en el dragado de casi 20,000 m³ de sedimentos, procedentes del arroyo Saladillo. Este material, catalogado como contaminado, será tratado antes de su traslado a un vertedero. Esta fase permitirá limpiar el fondo de la dársena y evitar malos olores durante los próximos meses de calor. Además, Landaluce recordó que de forma paralela a este dragado ecológico, el Ayuntamiento de Algeciras está ejecutando el traslado de la actual estación de bombeo de aguas residuales con fondos del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, lo que resolverá los problemas históricos de saneamiento que afectan a esta dársena.
Esta no es la única obra que la APBA lleva a cabo en la zona, ya que también están avanzando las obras en la orilla norte de la dársena, con una inversión adicional de 3 millones de euros en un nuevo muelle para el Servicio Marítimo de la Guardia Civil. Este muelle, de 167 metros de longitud y más de 15 metros de anchura, con hasta 4,50 metros de calado, está diseñado para ofrecer un mejor espacio y calado para las nuevas embarcaciones del cuerpo y facilitar el cumplimiento de sus funciones.
Landaluce ha señalado que las obras finalizarán en 2025, con lo que “con ambas inversiones de la APBA que suman más de 8 millones de euros, sumada a la actuación del Ayuntamiento en la estación de bombeo, arrancamos la transformación de la dársena deportiva para que a partir de 2025 los ciudadanos puedan disfrutarla mejor”.
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