Andrea Fay Friedman, reconocida por su papel en la serie de televisión 'Life Goes On', falleció el pasado domingo en su residencia de Santa Mónica, California, a la edad de 53 años. La triste noticia fue confirmada por su padre, Hal Friedman, quien indicó que la causa del fallecimiento fueron complicaciones derivadas de la enfermedad de Alzheimer, una condición que afecta comúnmente a personas con síndrome de Down mayores de 50 años.
Nacida el 1 de junio de 1970 en Santa Mónica, Friedman se distinguió no solo en el ámbito de la actuación, sino también como una defensora de la representación de personas con discapacidades del desarrollo. En una entrevista telefónica, su padre compartió que Andrea se refería a su síndrome de Down como su "síndrome ascendente", reflejando una actitud positiva y de superación frente a su condición.
Después de graduarse de la Escuela Secundaria Bautista de West Los Angeles, Friedman estudió actuación y filosofía durante dos años en el Santa Mónica College. Su gran oportunidad llegó en 1992 con su participación en 'Life Goes On', interpretando a Amanda Swanson, la novia y luego esposa del personaje principal, Corky Thatcher. Su excelente actuación la consolidó como un personaje regular durante dos temporadas del programa.
Friedman también dejó su huella en otras producciones televisivas, incluyendo 'Baywatch', 'ER' y 'Law and Order: Unidad de Víctimas Especiales'. En 2019, apareció en el drama navideño 'Carol of the Bells', interpretando a la madre biológica de un hombre con discapacidad del desarrollo.
Más allá de su carrera en el entretenimiento, Andrea Friedman desafió las percepciones y estereotipos sobre las personas con síndrome de Down. Según palabras de su hermana menor, Katherine Holland, la fama de Andrea cambió la forma en que la gente la veía, pasando de ser reconocida por su condición a serlo por su talento y trayectoria.
Friedman también estuvo involucrada en un episodio controversial en 2010, cuando prestó su voz a un personaje con síndrome de Down en la serie animada 'Family Guy'. Esto generó un desacuerdo con Sarah Palin, exgobernadora de Alaska, cuyo hijo también tiene síndrome de Down. Friedman respondió a Palin enfatizando la importancia del humor y su crianza enfocada en vivir una vida normal.
La partida de Andrea Fay Friedman deja un vacío en la industria del entretenimiento y un legado de lucha por la inclusión y la representación de personas con discapacidades. Su carrera y vida personal son un testimonio de su espíritu luchador y su compromiso con cambiar la forma en que el mundo ve a las personas con discapacidades.
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