Los campos de generación en cualquier combinado nacional de futbol son ley de vida. Los años no pasan en balde para nadie y menos para deportistas de primer orden mundial, cuyo nivel de exigencia físico sobre pasa casi los límites establecidos y no puede alargarse demasiado en el tiempo, debido a la exigencia tanto mental como muscular que requieren partidos y competiciones de primer orden futbolístico.
La selección española se encuentra en estos momentos en la tesitura de realizar este cambio de plantilla, ya que la mayoría de los hombres que tantos réditos dejaron en el combinado nacional o bien colgaron las botas o bien están ante sus últimos servicios a su país. Hombres como Xavi Hernández, Andrés Iniesta, David Villa o Xabi Alonso necesitan sucesores en sus posiciones que al menos se acerquen a las prestaciones que estos jugadores históricos demostraron cuando se vestían con la casaca de su combinado nacional.
La Eurocopa 2020 está en ciernes, y es turno para que Robert Moreno perfile la estructura de la plantilla con la que acudirá a la cita marcada en rojo en el calendario por millones de aficionados al futbol del viejo continente. Es necesario incorporar juventud a La Roja como se ha producido en las últimas convocatorias, y es ahí donde futbolistas consolidados en el máximo nivel como Dani Ceballos, Saúl Ñíguez o Rodri Hernández deben cumplir con las expectativas puestas sobre su juego, y están llamados a ser los referentes en la próxima década dentro de la selección española.
Es hora de cambiar la tendencia tan negativa demostrada por España en las últimas fases finales tanto de Eurocopas como del Mundial. Esa es la premisa con la que tanto Robert Fernández como toda su plantilla acudirán a la cita el próximo verano. Deberán ir contra los pronósticos, ya que Betway no ve a La Roja como una de las máximas favoritas a la victoria final, colocando por delante a combinados nacionales como Francia e Inglaterra, las cuales hicieron un buen papel en el pasado mundial, hasta el punto de alzar el trofeo al cielo como hizo el combinado galo al conseguir su segunda estrella.
Aunar experiencia con juventud debe ser un punto a favor para España, si Robert Fernández da con la tecla correcta de cara a plasmar su idea de juego sobre el terreno de juego. Pese a lo que estimen casas de apuestas como Betway, todos los pronósticos hay que plasmarlos después sobre el terreno de juego. En cada fase final de un gran torneo siempre se producen sorpresas y decepciones, y en este primer grupo espera estar un combinado nacional con ilusiones renovadas al contar con jugadores con hambre de títulos a nivel internacional.
El relevo generaciones de España es ya una realidad. El listón está muy alto, pero es público y notorio que estos jóvenes diamantes tienen una sobrada calidad para mostrar un nuevo camino al combinado nacional.
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