En Villamartín, Cádiz, se están llevando a cabo desmoches totales o parciales de árboles en una de las calles principales del pueblo, afectando especialmente a aquellos situados en zonas con terrazas de bares.
Según Amigos del bosque, se han eliminado completamente las ramas de 17 árboles, argumentando que "dan mucha mierda", lo cual ha desequilibrado a los árboles, dejándolos vulnerables a enfermedades y plagas. Estos cortes, efectuados en primavera, periodo de crecimiento activo, impiden que los árboles realicen funciones cruciales como la absorción de CO2 y la reducción de las temperaturas urbanas. Además, los desmoches han afectado a los polinizadores al impedir la floración y han puesto en riesgo la vida de polluelos en nidos.
La organización hace un llamamiento al ayuntamiento para que revise estas prácticas y considere su impacto ambiental y social.
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