La Policía Nacional ha procedido a la detención en Vélez-Málaga de un varón acusado de agredir sexualmente a diversas mujeres, a las cuales previamente sedaba y posteriormente grababa en video. Las afectadas, que forman parte de su círculo de amistades, sufrieron agresiones en distintas fechas y ubicaciones, sin tener conocimiento de haber sido objeto de un delito de esta naturaleza. Aunque se han identificado a cinco mujeres, los investigadores no descartan encontrar nuevas víctimas. Los cargos que se le imputan al arrestado, que ya ha sido encarcelado, son cuatro por agresiones sexuales y cinco por delitos contra la intimidad.
Las pesquisas dieron inicio el mes pasado, en agosto, cuando una mujer denunció ante la Unidad de Familia y Atención a la Mujer (UFAM) de Melilla haber hallado en el hogar que compartía con su pareja un disco duro. En este dispositivo se almacenaban fotografías y vídeos en los que se mostraba a varias mujeres, ya sea semi-desnudas, dormidas o bajo la influencia de algún sedante, siendo objeto de diversas prácticas sexuales por parte de un hombre. Ante la posibilidad de que tales actos no hubieran sido consensuados, decidió realizar una copia del disco y notificarlo a las autoridades.
Tras un meticuloso análisis del material, los investigadores notaron que en algunas grabaciones aparecía el detenido cometiendo actos sexuales sobre diferentes mujeres que se encontraban inconscientes. Asimismo, él mismo registraba dichos actos. Se identificó a cinco víctimas que declararon no tener conocimiento de tales grabaciones ni de haber sido víctimas de un delito sexual.
Se descubrió que las agresiones se cometieron repetidamente a lo largo de varios años y en diferentes lugares, durante viajes con grupos de amigos que incluían al arrestado. Al parecer, suministraba a las víctimas alguna sustancia que las dejaba inconscientes para proceder con las agresiones.
La operación llevada a cabo en torno a su domicilio resultó en su detención. Posteriormente, se realizó un registro de su vivienda donde se confiscó material tecnológico aún pendiente de ser examinado. Tras presentarlo ante un juez, se determinó su ingreso en prisión de forma preventiva.
Aún se encuentra abierta la investigación, ya que se considera la posibilidad de que existan más víctimas en Melilla, Málaga o Córdoba, lugares donde el detenido ha vivido.
Cabe destacar que, según diversas informaciones, el detenido es un sacerdote de 34 años de edad.
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