El PSOE de Cádiz ha anunciado su intención de implantar la gestión directa del Servicio de Asistencia a Domicilio si vuelve a gobernar, con el objetivo de que "el beneficio no repercuta en las empresas sino en quien realmente realiza un trabajo tan duro como son las mujeres que sacan adelante el servicio". Esta declaración se realizó en la víspera del pleno extraordinario en la Diputación sobre el Servicio de Asistencia a Domicilio.
La secretaria de Organización del PSOE de Cádiz y portavoz del Grupo Socialista en la Diputación, Ana Carrera, ha criticado al PP por su gestión durante los últimos ocho años. Según Carrera, "el PP estos ocho años en la oposición lo estuvo prometiendo, pero se va a certificar que están instalados en el engaño permanente como ha pasado con los compromisos incumplidos a otros colectivos como los empresarios ya que no han puesto ni un solo plan en ningún sector importante que genere empleo en la provincia, los funcionarios o los agricultores a los que le anunciaron a bombo y platillo un plan de compensación del campo que un año después aún no ha visto la luz".
Carrera subrayó que el Partido Popular utiliza la institución como una herramienta política para beneficiar a los ayuntamientos donde gobierna, en lugar de cumplir con la palabra dada a muchos de los colectivos con los que se habían comprometido para poner en marcha proyectos que beneficien a la provincia y generen empleo. Además, destacó que "el Partido Popular vuelve a renunciar a un servicio de ayuda a domicilio provincial que garantice unas buenas condiciones laborales a las trabajadoras que lo prestan porque vuelven a llevar unos pliegos para la licitación de este servicio".
En el pleno de enero, el PSOE ofreció colaboración al Partido Popular para trabajar a medio plazo en la municipalización del servicio de asistencia a domicilio, sin embargo, según Carrera, el PP "vuelve a condenar a tres años más al colectivo, incumpliendo ese compromiso que había".
Carrera enfatizó las difíciles condiciones laborales que enfrentan las trabajadoras del servicio de asistencia a domicilio, mencionando que "no es normal que estas trabajadoras tengan jornadas laborales de hasta 39 horas semanales, no es normal que estas mujeres estén todo el día con jornadas partidas que no les permitan la conciliación familiar, no es normal que estas mujeres con más de 60 años sigan teniendo que realizar un trabajo físico durísimo, sin tener una posibilidad de pasar a segunda actividad o una jubilación anticipada, igual que no es normal que la mayor parte del precio que las administraciones públicas dediquemos a este servicio repercuta la mayor parte en un beneficio para las empresas y no para el salario de las trabajadoras que sostienen el servicio".
Finalmente, Carrera abogó por que los recursos invertidos en el servicio de asistencia a domicilio repercutan directamente en la calidad del servicio a los usuarios y en mejorar los salarios y condiciones laborales de las trabajadoras.
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