La Asociación Española de Consumidores ha puesto en marcha de nuevo su Campaña Informativa sobre los grupos de WhatsApp en colegios y actividades extraescolares, con el objetivo de concienciar a las familias acerca de un uso responsable de estas herramientas de mensajería instantánea. La iniciativa se repite tras el éxito alcanzado en su edición anterior, en un momento en el que el regreso a las aulas multiplica la creación y uso de estos grupos.
Según la asociación, “una de las aplicaciones más utilizadas tras la vuelta al cole son las de mensajería instantánea, especialmente el WhatsApp. Ahora bien, esto está ocasionando ciertos problemas relacionados con la privacidad de los integrantes y la de sus hijos”. Uno de los asuntos más relevantes es la inclusión de personas en grupos sin contar con su consentimiento expreso, lo que ha generado quejas entre algunos usuarios.
La organización distingue entre varios tipos de grupos de mensajería. Por un lado, los que son creados por los colegios para comunicaciones oficiales entre profesores y familias, así como los que forman las asociaciones de madres y padres (AMPA). En estos casos, “es necesario tener el consentimiento de los padres para poder realizar este tratamiento y que se tenga acceso a ciertos datos personales”.
Por otro lado, estarían los grupos creados directamente entre padres y madres de alumnos para coordinar aspectos relacionados con la escuela. Estos últimos se consideran parte de la esfera personal, por lo que quedan excluidos de la normativa sobre protección de datos.
La asociación recuerda que los datos de los menores merecen una protección específica, ya que “los niños pueden ser menos conscientes de los riesgos. En este sentido, los padres o tutores deben ser quienes les protejan”. Para el tratamiento de información personal o imágenes de menores de edad es obligatorio contar con el consentimiento de quien ostente la patria potestad o tutela. Asimismo, cuando los centros educativos compartan imágenes a través de WhatsApp o redes sociales, debe analizarse si estas forman parte de la función educativa.
La campaña incluye una serie de recomendaciones dirigidas a las familias:
- “Estos grupos son exclusivos para ofrecer información. Así se debe compartir únicamente información relativa a la educación escolar de los niños y debemos asegurarnos que esa información es cierta y no se trata de un bulo.”
- “Estos grupos no deben sustituir la agenda del niño. Los padres no deben asumir cargas que le correspondan a los menores de edad.”
- “No se deben usar estos grupos para críticas al centro, profesores o padres. Esto tiene responsabilidades civiles en la medida que se hagan algunos contenidos inadecuados.”
- “Se recomienda escribir sólo lo necesario para evitar una saturación de mensajes.”
- “Por supuesto debemos respetar la privacidad. Así no se deben compartir fotos de menores de edad, profesores o del resto de padres sin consentimiento. Del mismo modo, no se deben compartir estas fotos fuera del grupo y sin permiso.”
- “Finalmente, en caso de que exista alguna vulneración de derechos recomendamos solicitar asesoramiento previo y realizar denuncia ante la Agencia Española de Protección de Datos o tribunales en el caso de que la vulneración sea grave.”
Con esta campaña, la Asociación Española de Consumidores insiste en promover un uso seguro de los grupos de mensajería en el ámbito escolar, que permita conciliar la utilidad de estas herramientas con la protección de la privacidad y los derechos de los menores.
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