Cuando se celebra la Gran Final, el cielo de Cádiz se tiñe de emociones especiales y las coplas se adueñan no solo de los ladrillos del Gran Teatro Falla, sino de cada corazón de cada carnavalero. Un cúmulo de sensaciones que va creciendo a lo largo de la noche con cada agrupación, y que a fin de cuentas deja en un segundo plano el reparto de premios.
Julio Pardo y su ‘Don Taratachín’ abrían esta última sesión del Concurso con un coro que dejó muy buenas sensaciones, defendiendo al Carnaval de Cádiz independientemente del reconocimiento de la UNESCO. Gago y su cuarteto “Lo mismo nos vemos en Elcano que en clase de piano” cogían el testigo con la responsabilidad de seguir calentando la noche en su defensa del primer premio. Su actuación, en general, al teatro, gustó.
La tercera actuación dejaba uno de los momentos mágicos de la noche. La comparsa ‘Los prisioneros’ enamoraron al Falla con dos grandes pasodobles del ‘Chapa’ y la música del ‘Noly’. Al final del popurrí, los pájaros salieron de la jaula hasta alcanzar la libertad y con ella, la lluvia de aplausos. Vera y sus africanos, que se encontraron el teatro de dulce, completaron también un buen pase.
El coro de Fali Pastrana “Los chimenea” demostró apostar fuertemente por el primer premio, que en su segundo tango hicieron un bello repaso del Cádiz de finales del siglo pasado y remataron con el recuerdo a Paco Alba. Con parodias recicladas, el cuarteto de Javi Aguilera irrumpía en el teatro, pero de igual manera arrancaba aplausos y risa, tal y como hizo El Selu posteriormente con su “grupo de guasa”, a golpe de crítica enmascarada en la ironía.
Sobre los ríos de la crítica no tuvo que demostrar saber navegar Juan Carlos Aragón, cuya comparsa “Los mafiosos” la tomó con el fanatismo religioso después de dedicar un hermoso piropo a Cádiz. Si el ambiente del teatro no estaba a un alto nivel, el coro de los estudiantes “Rockola” se encargó de terminar de animarlo para dar continuidad a una gran noche con un muy buen pase.
El cuarteto del Morera, “el equipo A minúscula (comando caleti)”, fue una de las agrupaciones que mejor pase hicieron en esta final contando con la participación de Martínez Ares. “Don Antonio” se reencontró con “el trinchera” y protagonizaron uno de los momentos del Concurso. Y, después, “tic-tac, tic-tac” paró el tiempo en el teatro con la bandera del andalucismo en la manija de sus relojes.
Algo más discreto fue el pase de la chirigota del Canijo “¡Qué caló!” que de todas formas su conexión con el público fue indiscutible. El coro de Luis Rivero “vive, sueña, canta” defendió con uñas y dientes su primer premio con un buen pase, creando todo un espectáculo que no decayó pese a la hora. No estuvo tan acertado el cuarteto “El trío”, que reciclando momentos de sus anteriores fases no completaron una brillante actuación pero su capacidad de conectar con el respetable volvió a quedar patente.
El Cascana hizo acto de presencia con las claras intenciones de pelear por el primer premio, y su actuación estuvo al nivel para pelear hasta el último momento, dando una lección de respetar al pedir al jurado que parara la actuación para que la Cruz Roja pudiera atender a un espectador que, aparentemente, había sufrido una bajada de azúcar. Gran actuación, pese ser a altas horas de la noche.
Puso, un año más, la comparsa de Martínez Ares el broche de oro con su comparsa “El perro andalú”. Consiguió llegar al corazón del público con dos bonitos pasodobles, con homenaje a Paco Alba de por medio, y también arrancó las risas con el cameo del Meni, el “trinchera” del cuarteto del Morera. Gran final para una Gran Final del Concurso.
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