Odiado Coronavirus:
Espero que al recibo de esta carta te encuentres en nefastas condiciones. Por aquí seguimos bien con 5 casos confirmados y curados según datos oficiales, pero tras salir del confinamiento cada vez te estás haciendo con más seguidores potenciales.
Antaño, que parece que estuviéramos hablando de muchos meses, pero han pasado solo 4 desde el inicio del estado de alarma, nos vimos las caras. Hasta en tres ocasiones has venido a visitarme a la consulta desafiante y maltratando a esos pacientes, pero no has logrado infectarme y hoy en día aquellos pacientes ya se encuentran totalmente restablecidos. Sé que he tenido suerte, aunque me haya protegido y también sé que en Cádiz la suerte también ha estado de nuestra parte. Me dices que la suerte no dura eternamente y que estás agazapado esperando el momento oportuno para volver a atacar, los sanitarios y trabajadores de primera línea estamos preparados como la otra vez, aunque ahora te conocemos un poco más y tú nos conoces a nosotros.
Ya me dijiste cuales serán tus primeros objetivos: los que no usan mascarilla, los que se la quitan para hablar, los que se la ponen mal, los que dicen que les molesta y la agarran continuamente en la calle, los que te menosprecian pensando que aquí no nos va a tocar o va a ser como antes 4-5 casos. Curioso que piensen eso cuando en octubre somos 120 mil habitantes y ahora algunos más y la mayoría del turismo acude desde zonas donde tu prevalencia ha sido muy alta. Ese amable turismo, que en muchos casos son ya medio gaditanos y gaditanas, si se protege y nos protegen. ¿Será que quieren más a Cádiz que nosotros? No es eso, es que han aprendido a base de ver a familiares, amigos, vecinos, hospitalizados, fallecidos, sufriendo y les aterra vivir de nuevo esa situación tan dramática. Me cuenta un amigo de Albacete que ha perdido dos familiares cercanos (su suegro y su tío) por esta pandemia y que este año jamás se borrará de su memoria. Llamo a Theo Vargas, periodista de la cadena SER, que tras más de un mes en la UCI tras padecer la enfermedad y todavía hablando con dificultad tras 2 meses de alta, cansado y mermado, me cuenta que ha sido un milagro que esté vivo como los que tantas veces nos hizo nuestro Cádiz CF. Hablo con Julio de Vitoria, que ha estado casi un mes encerrado en la habitación de su casa porque dio positivo, con dibujos en papel de sus hijas que recibía por debajo de la puerta, sin poder abrazarlas, casi sin verlas, deseando que llegue el momento de abandonar la habitación de su propia casa.
Son hechos reales que nos debería remover la conciencia y que por supuesto, estamos comprando las papeletas para que nos toque si no le echamos sentido común.
Ya sé coronavirus maldito que la barrera de la mascarilla te dificulta bastante para reproducirte y colonizarnos, estás optando ahora por hacerlo con esos adolescentes y jóvenes que van en grupo y no las llevan, que se ven fuera de peligro. Claro, como su sistema inmunitario es fuerte, son un buen huésped para pasar desapercibido como asintomático y cuando vayan a casa de sus abuelos, sus mayores que están deseando darles un beso ¡¡zasca!!, ahí me instalo y aquí sí que haré mucho daño. ¿Serán ellos conscientes de tus planes?, si quieren a esos mayores tienen que usar la mascarilla siempre, aunque sea molesta por un rato, habrá merecido la pena para que sus abuelos puedan seguir abrazándolos. Molestar siempre nos molesta a todos, veo a mi buen amigo Narci, policía y trabajando con ella puesta en un coche a 40 grados, dando ejemplo y avisando al que la lleva mal puesta o no la tiene, pronto será con multas de 100 euros mínimo me comenta. Veo a mi amigo Fran trabajando de enfermero en la playa a más de 40 grados en su puesto de enfermería, que se lleva las manos a la cabeza como yo porque la gente llega sin mascarilla. Me enseña marcas en la cara, sudando y con las dificultades para atender con esos "atuendos" obligatorios pero que sabe son el salvoconducto de su salud. Por eso si luego le veo a usted sin mascarilla me da rabia, por Joaquín, por Theo, por Julio, por Narci, por Fran, por ellos, por todos y todas. USA BIEN LA MASCARILLA.
Por favor no hagamos todo esto más complicado de lo que ya está, llegará la vacuna y te venceremos coronavirus criminal, pero mientras tanto hagamos uso de las medidas y de la mascarilla. En esta guerra no solo están los muertos, los enfermos y los confinados, en esta guerra de la vida y la salud todos y todas estamos en primera línea.
Firmado: Fernando Arévalo, uno de los que se considera tu enemigo, ASESINO CORONAVIRUS.
Dr. Fernando Arévalo Rosado
Médico de Atención Primaria
N°colegiado 111108133
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